Recuerde una situación en la que factores emocionales de los estudiantes interfirieron o favorecieron de manera significativa el aprendizaje. ¿Qué ocurrió y cómo lo manejó?

Cada vez es más frecuente encontrar estudiantes universitarios con habilidades insuficientes para controlar sus emociones o con algún trastorn psiquiátrico.
Hace algún tiempo tuve una alumna que era muy agresiva (verbalmente y con sus actitudes). La interacción con ella era difícil y faltaba a clase, sus trabajos eran de mala calidad, me procupaba porque no sabía cómo decirle que tan solo por asistencia, no alcanzaría el 80% para aprobar el curso. En una ocasión platiqué con ella sobre sus faltas y le dí una última oportunidad, pero le pedí que ella misma de su puño y letra elaborará y firmará un convenio, en el que se comprometía a no faltar más y entregar todas sus tareas en tiempo y forma. En esa reunión me comentó que sufría de un trastorno psiquiátrico de personalidad. Después de esto ella volvió a faltar y no se volvió a presentar, solucioné el problema de cómo decirle que no alcanzaba una calificación aprobatoria, pero no la de su aprendizaje, a pesar de estar en una Tutoría individual. Desconozco si continúo o no en la licenciatura, no volví a verla. Pero es preocupante el aumento de estudiantes con trastornos psiquiátricos.